Saturday, May 07, 2011


DISCURSO DE INAUGURACION:
“MALOCA DEL APRENDIZAJE Y ENCUENTRO INTERCULTURAL”
Para el 17 de Junio – 2011

Actualmente, el mundo de los conocimientos tradicionales y la ciencia exploran escenarios de confluencia después de muchos años de dispersas y furtivas relaciones; principalmente, en el campo de la medicina humana, agricultura y conservación de los recursos naturales. La ciencia médica tiene un banco de topes respecto al encuentro de nuevas medicinas necesarias para el tratamiento de enfermedades incurables hasta el momento y que pasarán al cuadro de enfermedades letales del futuro. Los impactos de los monocultivos (soya, caña de azúcar, algodón, maíz, eucalipto, palma aceitera) han simplificado la composición integral del bosque y reducido su facultad de regeneración; su consiguiente daño al medio ambiente implica graves problemas sociales y económicos en agravio de las comunidades locales y pueblos indígenas. Las culturas primigenias de la amazonia han coexistido con el bosque en virtud de una saludable reciprocidad hasta que la práctica comercial sucumbió el reino de la frondosidad; pues, la conservación del bosque no es reducir el territorio de subsistencias de los pueblos; tampoco es canjeable para la tolerancia del industrialismo recalcitrante.

El imponente avance de la ciencia como cauces abruptos y prolongados drenajes ha mejorado los cultivos, asistido al sediento y, también, logró desbordar importantes componentes de la primera fuente de vida de la humanidad: el bosque y sus recursos conexos. Ojos funestos lloran sin cesar su desventura hacia del desfiladero y la presión de entrañables dolores. Los esfuerzos de los incriminados (países desarrollados) para salvar el bosque no serán posibles hasta que los planes de hegemonía, expansión geoestratégica y la codiciosa ética utilitarista sean reformados por otro modo donde el ser humano y el bosque tengan la misma jerarquía.

La “Maloca del Aprendizaje y Encuentro Intercultural”, levantado en medio de la ciudad, es un símbolo de la frondosa continuidad cultural primigenia de la amazonia. Es un lugar de coexistencia hacia adentro y hacia afuera; donde los conocimientos tradicionales de varios pueblos indígenas habrían de manifestarse en la ruta hacia el aprendizaje mutuo y el encuentro permanente en privilegio de la interculturalidad exógena. Después de un largo caminar habrá una nueva experiencia, identidades claras, liderazgos en movimiento y sueños en construcción.

Miguel Ángel Asturias (Premio Nobel de Literatura 1967 – Guatemala), dijo, es importante propugnar el orgullo indígena y reivindicar la herencia cultural de un país con raíces autóctonas en un mundo contemporáneo donde coexisten el mito y la razón. Arguedas en “Todas las Sangres” expresó y defendió los valores culturales de los Pueblos Indígenas libre de opresión; y el problema de la modernización debe superarse mediante la creación de puentes conducentes a una armoniosa interculturalidad.

Cometimos el grave error de prescindir la sabiduría milenaria a partir de la vehemencia de la ciencia sectaria. Hoy, es tiempo de caminar sembrando con el mismo objetivo: construir un mundo sostenible donde todos puedan vivir sin mayores peligros.