Friday, November 29, 2013

En pos de una Cumbre promisoria.


Las destacadas cualidades de los eventos de gran trascendencia histórica que viene organizando COICA en busca de una alternativa dinámica y propia que actúe como parapeto frente a los daños perpetrados por las actividades extractivas tendrá una segunda oportunidad para revisar los principales ejes temáticos encaminadas, evaluar acciones concretas sobrellevadas, afianzar estrategias articulados con nuevos desafíos y vigorizar las relaciones organizativas e individuales de los pueblos indígenas amazónicos de américa del sur. En la inminente II Cumbre Regional Amazónica que se llevará acabo en Villavicencio – Colombia (del 13 al 15 de diciembre 2013) se habrá de confluir valores y capacidades construidas en la I Cumbre de Manaos – Brasil (agosto 2011), cuya estructura se diseñó denotando respetuosamente la riqueza y efluvio que emana los saberes ancestrales y la armonía saludable que vierte los bosques de su espléndida y frondosa tesitura, en efecto, fue denominado “I Cumbre – Saberes ancestrales, pueblos y vida plena en armonía con los bosques”.

La próxima II cumbre más bien hubiere de semejar a una pequeña y profunda laguna donde llegan las aguas de los tributarios amerindios, quebradas y flujos subterráneos para converger en un sueño progresivo y sostenible que llevarán consigo la madurez de los temas tratado en la I Cumbre y la determinación de arrostrar toda amenaza del derecho de bienestar de los pueblos, entonces, fue llamado con ferviente expectativa “II Cumbre Regional Amazónica – vida plena amazónica frente al IIRSA y desarrollismo”. Esta cumbre contiene un su estructura y en su espíritu componentes reivindicativas y propositivas, que de acuerdo a la agenda oficial de COICA, estará basado en “tres paneles centrales: ‘El IIRSA, impactos y alternativas’, ‘Desarrollismo, extractivismo y alternativas’, ‘Plan de Vida Amazónica’, a la vez, se trabajarán en cuatro grupos con el objetivo de lograr una mejor interpretación de los acontecimientos locales y globales que permita, con su brillo, consensuar acuerdos alcanzables y medibles.

En el decurso, según los registros vigentes, se han agrupado alrededor del esfuerzo de defender la amazonía desde un enfoque primigenio –que implica la insustituible cualidad de manantial de la vida y cultura regional y global– importante voluntad y capacidad científica, académica, de líderes de opinión y foros intergubernamentales de todo el mundo. Esta creciente y sólida plataforma en sí constituye la columna vertebral de una emergente fuerza de equilibrio que necesita el sistema económico del planeta para demorar o replantear su doctrina de desarrollo contraproducente y dañino para los pueblos y comunidades que nacieron para florecer juntamente con el bosque, en una dualidad recíprocamente provechosa, de infinita hermosura y prolongada exención de la pobreza asfixiante y resultante de la lógica “amo y esclavo”. Sin embargo, el proceso dilucida desafíos superables como la ausencia de empatía e identificación con otros territorios de la misma casta que hubiesen  de estar juntos, por una cuestión de vida y muerte, construyendo el mismo futuro.


Habrá en el recinto de la II Cumbre circundando el espíritu de nuestros sabios y valientes antepasados, diseminando en cada corazón el sentido de la verdad, la justicia y el buen ejemplo. Habrá sesiones espirituales de los pueblos indígenas anfitriones (Huitoto, Puinave, Kurripako, Piapoco, Sicuani, Yeral, Bara, Barasana, Carapana y otros).

Sunday, November 24, 2013

COP 19: renuencias y avances.


Ya el 16 de octubre del 2013, el Parlamento Europeo, tenía proyectado una propuesta de resolución sobre la Conferencia 19 de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP19), recientemente culminado en Varsovia – Polonia. La propuesta de resolución ha sido estructurado tomando en cuenta los compromisos, metas y desafíos inherentes a la evolución de la COP (desde la COP 1 - Berlín en 1995 “Mandato de Berlín” hasta la COP 18 – Doha del 2012 “donde se confirma la falta de acuerdo para una solución más decisiva y se extiende el Protocolo de Kioto hasta el 2020, comprometiendo sólo a la Unión Europea, Australia y un puñado de otros países en desarrollo”).

Los principales temas de la propuesta han sido tratados en la COP 19 que pasaron por la discusión y evaluación del avance de la “Plataforma de Durban” que considera la reducción de emisiones mundiales por debajo de los niveles de 1990, la transición del “Protocolo de Kioto” hacia un régimen internacional que involucre a todas las partes, la “brecha en materia de mitigación” de la emisión de gigatoneladas de CO2, el “financiamiento para el clima” para la lucha contra el cambio climático hasta 100 mil millones de dólares anuales antes del 2020, la “adaptación, pérdidas y daños” que busca abordar las pérdidas y daños asociados a los impactos de los desastres naturales, la “reducción de las emisiones resultantes de la deforestación y la degradación forestal (REDD+)”, “Política energética” en busca de energías renovables, “Diplomacia Política” que procura establecer un “pacto climático” universalmente aplicable, y otros temas.
Durante la discusión y negociación de los principales temas de la COP 19 se puso en evidencia y se confirmó entonces el barrunto de individuos e instituciones que sostenían la prevalencia, en este evento, de los intereses empresariales del mundo. En este rumbo, el día 21 de noviembre (a los 11 días de duración de la COP 19) estalló una bomba de tiempo enriquecido por la falta de voluntad política de los países industrializados e históricamente responsables del cambio climático, cuyo impacto abatió directamente las posibilidades claras de concreción de acuerdos relacionados con los mecanismos de “financiamiento para el clima” y de “daños y pérdidas” presentado por el G-77. En consecuencia, según la prensa europea Euroxpress, ese mismo día “el bloque de 133 países en desarrollo se retiró de las conversaciones para alcanzar un tratado internacional sobre el cambio climático, en protesta por la renuencia del mundo rico a financiar los daños y pérdidas que está causando el calentamiento global. Ese mismo día la agencia de noticias EFEverde informó que “medio millar de activistas de las principales organizaciones no gubernamentales del mundo en las que se encuentran Greenpeace, Oxfam, ActionAid, WWF, International Climate, Amigos de la Tierra, entre otros abandonaron la Cumbre ante la falta de avances y se ha puesto los intereses de las industrias energéticas sucias por encima de los intereses de los ciudadanos  del mundo, en una Cumbre del Carbón y el Clima” celebrada simultáneamente”.

En el comunicado conjunto de las ONG y movimientos sociales, en unos párrafos, dicen “Las organizaciones abajo firmantes nos solidarizamos con los millones de afectados por el tifón Haiyan y con todas las personas afectadas por el clima. Nuestra solidaridad nos obliga a decir la verdad sobre la COP 19 - la Conferencia sobre el Clima de Varsovia. La Conferencia sobre el Clima de Varsovia, que debería haber sido un paso importante en la transición justa hacia un futuro sostenible, está en la vía de no conseguir prácticamente nada. De hecho, las acciones de muchos países ricos aquí en Varsovia están socavando directamente la propia Convención, que es un importante proceso multilateral que debe tener éxito si se quiere solucionar la crisis climática global”, “no ha habido avances significativos en un punto clave como es la financiación, que sigue casi sin financiación real, y las negociaciones sobre daños y pérdidas se han paralizado porque los países ricos se niegan a consensuar la esencia de este mecanismo internacional”.

COICA y sus organizaciones asociadas presentaron en el seno de la COP 19 la propuesta de “Redd+ Indígena Amazónico” articulado con el “Plan Amazónico de Vida Plena”, que implica la definición de metodologías de medición de almacenamiento de carbono, respeto a los derechos socioculturales, territoriales y la integralidad de los servicios ecosistémicos del bosque. La misma que encarna el espíritu de lucha a nivel global de los pueblos indígenas.

La agencia de noticias AFP informó que “En las últimas horas de negociaciones, la Conferencia 19 de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP19) alcanzó un acuerdo sobre el mecanismo de financiamiento para el programa Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de los bosques (REDD). Se trata de los sistemas de financiamiento, niveles de referencia de las emisiones forestales, medición, reporte y verificación de las emisiones relacionadas con los bosques”

¡Hasta la COP 20 – Lima Perú!

Friday, November 15, 2013

Putumayo: hacia dónde vamos.

Revisando las principales experiencias de progreso de la humanidad me detuve en la metafísica (análisis de la materia más allá de la física) de Hegel para tratar de explicar el rumbo histórico del putumayo. Es cierto que esta reflexión no abrirá una fórmula concreta que dé solución a nuestros problemas sociales sino echará un poco de luz sobre la forma de cómo estamos creciendo. Dice Hegel, en resumen, que para entender la historia y el mundo mismo es necesario comprender una progresión en la que cada movimiento sucesivo surge como una solución de las contradicciones inherentes al movimiento anterior. Bien, la progresión (RAE: Acción de avanzar o de proseguir algo) histórica del putumayo avanzó con el efecto de una reducida fuerza de movimientos sociales anteriores que también causaron soluciones insustanciales en los movimientos sucesivos (actuales). Es decir, no hubo acontecimientos sucesivos que hubo de surgir de la solución de algún problema generacional. Por ejemplo, la época del caucho que costó la vida de miles de nuestros antepasados no es resultado de la solución de ninguna contradicción anterior. Y de la época del caucho entendido como una contradicción no generó ningún movimiento de solución sucesivo. En efecto, la solución hubiera propiciado la unidad y el compromiso colectivo de progresar e inmortalizar los valores de la libertad (sujetos de deberes y derechos) y la perseverancia en la búsqueda del bienestar y el respeto, tal como dice la historia de los EE. UU después de su independencia y el brillo de los japoneses después del genocidio que causó la bomba atómica en Nagasaki e Hiroshima.

Tomé como ejemplo la época del caucho porque es sin duda el mayor acontecimiento de nuestra historia putumayense que hubiera marcado la ruta de nuestro futuro. Luego, algunos sucesos posteriores como el levantamiento popular contra alcaldes fuleros y enemigos de la claridad tampoco dieron origen a una época mejor de gobernabilidad.

Entonces, para lograr la validez del razonamiento de Hegel en nuestra tierra debe ocurrir una eclosión de acontecimientos nutrida y rica de valores para sentar las bases de la contradicción que hubiera de solucionar los movimientos subsiguientes. Mientras no ocurra algo grandioso, fuerte y sostenido en una nueva cultura nuestra historia habrá de enflaquecer cada día más en agravio de miles de almas de rezan pidiendo a Dios una nueva oportunidad de bienestar.


Queda muy claro entonces que el bienestar de los putumayenses depende totalmente del progreso mental permanente y de los valores del individuo (de su gente). La eficiencia social de la política, la educación, economía, el deporte y otras entidades son instrumentos que han de reflejar la madurez y probidad del pueblo. Mientras tanto, debemos alcanzar y ejercer posiciones vinculantes con el deber de forjar un mejor porvenir. Saludos.

Tuesday, November 12, 2013

Cumbres indígenas y el equilibrio global.

En la última década los pueblos indígenas de américa lograron situarse, con perseverancia y milenaria personalidad, dentro del sistema de negocios del mercantilismo global y pusieron en órbita el mundo holístico y animista que recibieron del padre creador, con la divina instrucción de cómo cuidar su belleza, fertilidad, prodigalidad y fragilidad. En el camino hollaron signos de legendaria vitalidad relacionados con la reciprocidad y unidad, transición y adaptabilidad organizativa, vigencia de la espiritualidad saludable y productiva –recientemente tuve un inesperado pero aleccionador coloquio con el apu Alberto Pizango (Presidente de AIDESEP) donde logré reconfirmar la eficacia de la medicina propia que se logra a partir de una catarsis consumada, abstinencia prohibido de incumplir y con la permisión vigilada de los espíritus de las plantas curativas. Esta panacea de orden inmanente  que combina procedimientos, fórmulas primigenias y palabras simbólicas que invocan bondad, está devolviendo paso a paso la buena salud del apu Alberto en armonía con su propia fe y confianza en lo nuestro–, y los obstáculos o problemas recurrentes fueron convertidos en desafíos y por sí misma convocaron a una fuerza creciente de interés social y temática que podría yo distinguir en dos vías confluyentes: uno de vida local - comunitaria y otro de vida transfronterizo. La primera vía hizo posible la existencia de la segunda y éste migró hacia la necesidad de crear un espacio o varios espacios internacionales cuyos objetivos se tratan, actualmente, en una junta denominada “Cumbre”.

La vigencia del estatus de las cumbres –entendido como un escenario dinámico y vehículo de propuestas del pueblo hacia el mundo– está basado en la organización de voces e iniciativas que se han generado previamente en la vía local – comunitaria. En la vía transfronterizo las voces y propuestas son estructuradas por dirigentes indígenas y aliados teniendo en cuenta los protocolos técnicos y normativos de las corporaciones nacionales y supranacionales; luego según la naturaleza de cada materia son presentados al Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de la ONU, Convenio de Diversidad Biológica de la COP, Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, Organización Latinoamericana de Energía (OLADE), Comisión Interamericana de Derechos Humanos y otras instancias. Actualmente, los pueblos indígenas cuentan con un lugar en los ámbitos donde los estados y empresas toman decisiones globales. Sin embargo, no siendo vinculante algunos de los acuerdos adoptados constituyen una plataforma de debate, aprendizaje, incidencia y un símbolo del esfuerzo y de la capacidad visionaria de los pueblos indígenas.

Esta plataforma de propuestas, sueños e incidencia sostenida por los valores ancestrales y por el enjambre social que exigen respeto de la vida y de los bosques proveedoras de bienestar, pondera y retrae el nivel de contaminación y destrucción, de las fuentes naturales de vida, perpetrada en la amazonía por las actividades de la industria petrolera, maderera, energética (hidroeléctrica, monocultivos), conectividad (carreteras) y otros. Mientras discurre algunos efectos concretos y disuasivos los habitantes de la amazonía (bosquesinos y urbanos) articulan capacidades y conciencia de gran importancia con la finalidad de exigir transparencia, responsabilidad y límites en las actividades que amenaza el derecho del “buen vivir”.

Siguiendo el camino elegido en busca del bienestar y el respeto de los derechos fundamentales y colectivos, del 13 al 15 de diciembre COICA realizará en Villavicencio (Colombia) la “II Cumbre Regional Amazónica: Plan de Vida Plena frente al Desarrollismo y el IIRSA”; cuyos acuerdos serán presentados en la COP 20 (Lima, diciembre 2014). Y en Cauca (Colombia) inició ya (del 10 al 16 de noviembre del 2013) la V Cumbre Continental de los Pueblos y Nacionalidades del Abya Yala Territorio de convivencia, diálogo y negocio”. La articulación, convergencia y unidad de propuestas y capacidades del mundo originario frente al “desarrollismo” abrirá progresivamente el camino de la libertad y el respeto.        


Friday, November 08, 2013

COP 19: al acecho del poder.

Del 11 al 22 de noviembre de este año se llevará a cabo la Cumbre COP 19 en Varsovia, en virtud de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC). Los gobiernos y organizaciones que han de participar tendrán que posicionarse en relación a los altos niveles de polución y su gestión en beneficio de los seres vivos del planeta, así como plantear propuestas y acciones que trastoque la postura cerril de los países industrializados –responsables de la creciente contaminación del medio ambiente global–, cuya agenda de equilibrio estará a cargo, principalmente, de actores y organizaciones de la sociedad civil que buscan poner en vigencia estándares sociales y ambientales que actúen como salvaguardias de los derechos de comunidades y pueblos más vulnerables ante las amenazas del cambio climático.

Marcin Korolec, Ministro del Ambiente de Polonia y presidente de la COP, dijo que en la COP 19 participarán en las negociaciones, por primera vez, representantes del comercio mundial. A partir de estas declaraciones diferentes opiniones coincidieron con la búsqueda de la Unión Europea, en esta cumbre, de viabilizar su agenda basada en “expandir  los mecanismos de comercio de carbono y encontrar otras maneras de mantener un sistema industrial y financiero que depende del carbón, petróleo, gas y que se enfrenta a una crisis de múltiples dimensiones”. Está muy claro el camino que diseñó los países contaminantes y habrán de transitar sin atisbo a fin mantener el orden global en función al crecimiento económico y del control geopolítico del mundo. 

El 27 de septiembre del 2013, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) presentó su Quinto Informe y que fue firmado por los países vinculados. El informe confirma la participación humana en el avance compulsivo del cambio climático y reconfirma la tendencia de crear una mayor cantidad de “mercados ambientales”; las conclusiones de este Informe podrían ser tratados en las negociaciones climáticas de la COP 19.  A finales del mes de octubre del presente año, organizaciones ecologistas denunciaron a las Naciones Unidas por “ceder ante el poder corporativo que busca mercantilizar la naturaleza”.

Los pueblos indígenas amazónicos afiliados a COICA y AIDESEP presentarán en el seno de la COP 19 una pródiga de demandas y a la vez peculiar propuesta denominada “Redd+ Indígena Amazónico”. La finalidad y el espíritu de esta esta propuesta se expresa en el siguiente prontuario institucional: “Necesitamos reducir la deforestación y degradación, pero de otra forma, sin mezclar la naturaleza con las ganancias de los capitales, sin mezclar el agua con el aceite, sin someter la vida a los negocios de la Bolsa de Valores y sin ignorar las verdaderas causas de la deforestación”. Sin embargo, la correlación de fuerzas entre el capitalismo obstinado por el extractivismo – consumismo y las organizaciones que plantean poner fin a la contaminación del planeta tiende peligrosamente, en esta Cumbre, hacia la prevalencia de las decisiones de la élite económica mundial. En efecto, la calidad y realismo de las propuestas y la representación social –valores innatos y constructivos de COICA y AIDESEP– harán cada vez más permeable la pertinaz estructura de negociación liderado por la COP.


Los vehículos de transmisión de conocimientos construidos en materia de derechos relacionados con las actividades globales de contaminación deberán circular como sangre por el cuerpo humano, alimentando cada tejido y cada órgano (individuos y organizaciones) con sustancias que robustezcan y hagan brillar  la personalidad, el sello indígena en cada acción suya (expresión de la identidad) y propicie la confianza del éxito en un momento donde nuestras raíces absorben menos alimentos. 

Tuesday, October 29, 2013

Protocolo para una Vida Plena


El diciembre del 2014 se llevara a cabo en Lima – Perú la COP 20 (Conferencia de las Partes) en virtud de la continuidad de los acuerdos del Convenio Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático. La importancia de la COP 20, según algunos analistas, está relacionada con la búsqueda de un nuevo acuerdo climático sólido y vinculante –los compromisos de los países firmantes del protocolo de Kioto para la reducción de la emisión de gases de efecto de invernadero venció el año 2012– basado en acciones concretas a fin de confrontar el problema crucial del cambio climático, a partir de la implementación de políticas públicas de calidad y lograr “posición de consensos” para doblegar la reticencia de los países con mayor capacidad de emisión. Recientemente, en la reunión del G8 en Irlanda del Norte tomaron en cuenta la necesidad de mejorar el cumplimiento de los compromisos adoptados y reconocieron “que el cambio climático incrementa los riesgos económicos y de seguridad a nivel global”.

Durante ocho años de vigencia del Protocolo de Kioto (2005 – 2012), la emisión de gases de efecto de invernadero de los países desarrollados no han disminuido, las radiografías tomadas al planeta dan cuenta de los impactos ocasionados sobre la temperatura, orografía, extinción de especies, seguridad alimentaria y salud humana. En este contexto la perspectiva de futuro constituye un verdadero desafío de la COP20.

Los pueblos indígenas organizados en la estructura orgánica de AIDESEP  y COICA han venido, en los últimos años, diseñando propuestas orientados a contribuir en los esfuerzos de la humanidad para arrostrar el cambio climático. Las propuestas implica el manejo holístico de territorios de Vida Plena, cuyos componentes temáticos se refiere a la seguridad territorial, manejo integral de los recursos del bosque, género y Redd+. Es importante mencionar la aplicación de una metodología que se inspira en el originalismo cultural que durante miles de años guardó armonía productiva y constructiva con el mundo que pudieron conocer.  Por ejemplo, la propuesta de “Redd+ indígena” propugna el respeto de los derechos territoriales y colectivos de los pueblos indígenas, así como la adecuación inherente de los enfoques interculturales y globales. Con este mismo talante, objetivo y vitalidad espiritual COICA diseñará, en la II Cumbre Amazónica (diciembre 2013), la propuesta regional de los pueblos indígenas con aptitud de ser debatido e introducido en la consideración de la COP 20. Esta visión busca situar a los pueblos indígenas amazónicos en un escenario autónomo y libre para crear las condiciones de su propio bienestar, a partir de la pervivencia de las bondades del territorio y de la gestión de iniciativas técnicas y científicas. Estas iniciativas de origen colectivo son herramientas que podrían convertirse en protocolos para una vida plena, una vez validados y reconocidos por la conferencia y otras instancias supranacionales.


Es importante destacar, también, el esfuerzo de la Plataforma Climática Latinoamericana (PCL), con miras a la COP 20, que busca “consolidar una voz regional desde la sociedad civil” y aportar al proceso de negociaciones, teniendo como bandera los principios de “equidad, cooperación y solidaridad generacional”. Estamos frente a grandes desafíos que exige por si misma cualidad y unidad.  

Wednesday, October 02, 2013

Petróleo, fisura nuestra sociedad.

La sociedad loretana sufre una progresiva fractura ideológica y ética. La presencia de petróleo en su calidad de riqueza de mayor demanda en el mundo no ha brindado bienestar diseminada adecuadamente en la población. Los ´bosquesinos´ han sido más afectados por los daños que la actividad petrolera causó en las fuentes naturales de vida y en la forma de concebir el progreso. Los habitantes urbanos supeditados a las políticas públicas y de orden global sufrieron el oscurantismo de la transparencia desleal y de la manipulación de la verdad en agravio del discernimiento que para la vigencia de una civilidad digna hubieran evitado. Los ´bosquesinos´ no estaban, quizá actualmente impelido por la movilización social y la coherencia de propuestas afines, estarían considerados en la retrógrada forma de distribuir la renta petrolera. En el principio no había perspectiva de contingencia frente a una actividad que elevó la esperanza de toda una nación, la sociedad urbana había avizorado mayores oportunidades que por derecho de vecindad con los políticos hubieran obtenido. Los ´bosquesinos´ abrieron la puerta de su legendaria y frágil despensa sin haber comprendido ni estimado los problemas conexos a cualquier actividad que prescinde de la responsabilidad, observación y respeto. Han transcurrido muchos años para que por sí misma la actividad petrolera mal conducida manifieste su verdadera sombra, y la sociedad loretana ni se dio cuenta que tiene como legado una brecha casi irreconciliable entre la aquiescencia y la consulta previa, la transitoriedad y la sostenibilidad.

No podemos abstraer una realidad que nació de una pérfida historia, no habíamos tomado en cuenta la excepción del desencuentro y la voluptuosidad. Pues, la sociedad ´bosquesina´ y la sociedad urbana están divididas hasta los tuétanos. Más de la mitad de la población bosquesina está de acuerdo con el avance de la actividad petrolera sobre los bosques de cuyas bondades dependen para vivir sin mayores carencias, dicen que no hay en el tablero otra alternativa que jugar al sacrificio de la pieza más valiosa: el bosque, a cambio de una sonrisa que podría contribuir con el esperado camino hacia la satisfacción de necesidades que únicamente el dinero puede resolver: el acceso a la educación superior y el tratamiento de graves enfermedades. Obviamente que la postura confronta los demonios del “capitalismo salvaje” y, a la vez,  se convierte en la piedra angular que dará soporte a la industria energética, liberado y sin fecha de expiración. Los jóvenes bosquesinos, muchos de ellos han logrado concluir estudios superiores con el apoyo de las empresas petroleras, abrazan ideas “progresistas” y sueños que se han de amanecer con el desempeño de su profesión –empleo que recibirá de alguna empresa o institución pública cuya pervivencia depende directa o indirectamente de la renta petrolera–, y la cadena se hace más largo cuando otros jóvenes también buscan el “progreso”. Los ejemplos que pudiera dar son incuestionables en las jurisdicciones de los ríos Corrientes, Napo, Curaray, Pastaza, Marañón, Tigre y otros.

La sociedad urbana también está dividida. Podría yo estimar según el contexto que un 70% de la población urbana no rechaza la actividad petrolera en Loreto. Están de acuerdo los habitantes que están vinculados y relacionados con la empresa petrolera y con la empleocracia del Estado –los empleados públicos que son activistas ambientales han logrado estabilidad laboral que actúa como escudo ante inevitables represalias y los temores se alimentan de los escarmientos–, asimismo, los operadores de la economía de mercado de la Región Loreto garantizan la inversión privada en virtud de sus ganancias. La tendencia política – ideológica juega, con reticencia, en favor o en contra.

Sin embargo, la sociedad loretana dividida y subdividida está muy enterada de los costos y beneficios que trae consigo la actividad petrolera que no desecha su intención de ahorrar tretas y gastos de operación en agravio del medio ambiente, la biodiversidad y la salud de la persona humana. Pero, nadie está dispuesto a convertirse en héroe en una época donde la pobreza prolongada y asfixiante no se ha reducido, nadie sacrifica su costo de oportunidad sino cuando es autónomo o depende de alguna institución supranacional independiente.


Corresponde entonces construir una fuerza de equilibrio basado en tres dimensiones: 1. Entre los mismos bosquesinos, 2. Entre los mismos habitantes urbanos y 3. Entre bosquesinos y habitantes urbanos. Cada núcleo debe tener la capacidad de evitar la metástasis de los males históricos y presentes de las empresas petroleras. Cada uno debe actuar teniendo en cuenta la razón del bienestar duradero y los errores cometidos por la emoción y la conveniencia. Vamos por el diálogo vigilado, vinculante, tolerante, amplio y responsable. La división favorece siempre a los grandes intereses.

Tuesday, September 17, 2013

Otro boom petrolero en Loreto.


 “Lo que resulta paradójico es que, mientras que en los foros internacionales sobre cambio climático se habla de la necesidad de reducir urgentemente las emisiones de CO2 para frenar el calentamiento global, en los foros sobre retos energéticos se habla sobre la necesidad de que aparezcan nuevos yacimientos de petróleo para poder cubrir la demanda hasta la aparición de otras fuentes de energía. Ambas necesidades resultan incompatibles entre sí” - Fernando Bullón Miró. Asociación para el Estudio de los Recursos Energéticos (AEREN).

La demanda de petróleo, gas y biocombustible en el mundo impele a las naciones en la enfática procura de promover el crecimiento de la industria energética. Los estudios coinciden en sostener que la energía renovable no tendrá la capacidad aproximada de atender la demanda de petróleo que alcanzará en el año 2035 la cifra de 99, 7 millones de barriles diarios –actualmente el consumo mundial es de 87,4 millones de barriles diario–, cuyo progreso depende del invariable régimen de vida de la población que goza de mejor condición económica y que inculca a la clase emergente el estilo consumista, esnobista y metropolitano. Los países que compiten la hegemonía y control de las relaciones de poder mundial necesitan financiar distintos proyectos estratégicos (militar, tecnológico, ideológico, humanitario, artístico, académico, generación de empleo, inteligencia y otros similares) y, en efecto, han sido reticentes en la hora de suscribir protocolos internacionales que buscan estándares para reducir las emisiones producidas por la deforestación y la degradación forestal (REDD); pues, las industrias son vitales en este escenario y un pivote del capitalismo que fue diseñado para mantener incólume las dinastías encumbradas sobre los pueblos vulnerables. No quiero presentar al hombre como bueno y malo sino como un habitante que se mueve dentro de un laberinto como la del mitológico rey Minos o como un inmenso diagrama de flujo y reflujo de un sistema.

El Perú, que tiene un déficit de consumo de petróleo de más de 150 mil barriles diarios actuó, en los últimos 40 años de actividad petrolera en Loreto, con celeridad, codicia y falta de responsabilidad; generando graves impactos en los bosques y en la población humana que habitan pródigas tierras de aquella riqueza natural que hubiera ayudado, con el privilegio de su  aprovechamiento, a florecer la milenaria cultura de los pueblos Achuar, Kichwa, Awajún, Urarina y Kukama. Durante este periodo los pueblos indígenas han soltado gritos lastimeros, frémitos contestatarios, proyectos reivindicativos (Pepisco) y propuestas destinadas a ponderar el encuentro de justicia y verdad (Acta Dorisa). La resonancia de los debates, negociaciones y  movilidad por las calles de Iquitos de una indómita multitud de líderes ancestrales del pueblo Achuar, aún suenan vigorosamente en mi conciencia. Las empresas petroleras y el gobierno peruano empezaron hablar de tecnología limpia, reinyección de aguas de producción y descontaminación y, en breve tiempo, bajó el canon petrolero; ¿fue quizá por el alto costo que implica explotar petróleo sin contaminar y con inversión social?
Según varios informes, la empresa petrolera Perenco que opera en la cuenca del río Curaray  y que recientemente encontró petróleo en el lote 95 ubicado en la provincia de Requena (Loreto) se ha convertido en una promisoria empresa que devolverá a Loreto y al Perú la “seguridad energética”. Esta prospección productiva y económica activó el botón de emprendimiento del Estado para reforzar las condiciones legales, sociales y políticas en su afán de librar el camino de los que consideran obstáculos (Ley Consulta Previa, movilización comunitaria).


En un claro momento donde se necesita debatir propuestas y mecanismos orientados a evitar el ensanchamiento de la pobreza perpetrado por la actividad petrolera en Loreto, culmina el día de hoy, en Lima, la Tercera Reunión Regional Tripartita (Gobierno, Empresa y Pueblos Indígenas), con la participación de AIDESEP, COICA, OLADE (Organización Latinoamericana de Energía) y ARPEL (Asociación Regional de Empresas de Petróleo y Gas Natural en Latinoamérica y el Caribe); con el objetivo de “Impulsar el diálogo constructivo en relación con las actividades de explotación y explotación de hidrocarburo, a través de la construcción de iniciativas y objetivos comunes, en el ámbito nacional, que estimulen el desarrollo del potencial energético con respeto a los derechos pueblos indígenas”. Con el mismo espíritu, el próximo 20 de septiembre se llevará a cabo en Lima el Foro: Matriz energética sostenible y Petroperú. Loreto, el epicentro de las venturas y desventuras, habría de prepararse para un nuevo boom petrolero.

Friday, September 13, 2013

A FLOR DE AGUA.

Iquitos es una ciudad que está alejándose de la preferencia de los turistas, es hoy una posada con espíritu vanguardista donde brevemente coinciden la mayoría de personas que eligen visitar la selva noreste del Perú, con el fin de lograr una experiencia de ensueño y prospección utilitarista en su relacionamiento con la cultura vigente, con la historia y con la diversidad de especies que habitan áreas protegidas y lugares ignotos del bosque –es observado por su dimensión proveedora de vida saludable y generadora de riqueza supranacional, como una palpitante y elocuente señal de fruición del mítico “dorado”, que bajo su vetusto halo coexiste la imaginación y admiración de quienes huyen de la sofocante atmosfera urbana–; y disponen su tiempo para introducirse en el cuerpo y alma de la amazonía a través de experiencias que emanan, por ejemplo, de contemplar y tomar agua del cauce de pequeñas quebradas que son purificadas por alfombras de arena blanca y pequeñas piedras alisadas por los besos de coloridos pescaditos, y del profuso catarsis que las plantas medicinales procuran (ayahuasca, toé, tabaco, coca, ojé y otros vegetales) logran lecciones sobre la exploración de la conciencia, anulación de reminiscencias hostiles y de la enigmática presentación del futuro en base a duras pruebas de la confianza, fe y valor. Después de consumar los planes en la floresta se encandila el deseo, en cada peregrino, de percibir las virtudes del hermoso, providencial e infalible mundo del arte, literatura, ciencia y otros referentes de las sociedades “civilizadas” y “desarrolladas”; entonces, sedientos de sorber la belleza que el hombre  puede crear como símbolo de su ingenio e inteligencia deciden quedarse, con vigorosa expectativa, en la ciudad de Iquitos –evidentemente como parte de su itinerario–, y encuentran noches que auspician hedonismo, desenfreno y violencia –han sido asaltados muchos de ellos, golpeados y despojados de sus pertenencias en el momento en que las viejas campanas de la iglesia matriz daban las siete de la mañana, y el estridente bullicio de los medios de transporte terrestre engullía los gritos estentóreos de las víctimas–; cuya reprobación popular ha sido expresado también mediante el arte de la pintura, música y escultura esculpida por el talento loretano, como una protesta transversal frente a los problemas que afecta la seguridad y la paz. Los malhechores no han sido capturados, podrían estar ocultados en medio de la basura que se acumula prolongadamente y con breves intervalos en las calles de Iquitos.

Cada vez más los turistas deciden aminorar su tiempo de estadía en la ciudad y retornan a su país o ciudad de origen con agobiantes sinsabores que carcome e inhibe la magia tradicional, la sonrisa de su gente, el aroma de las flores y el honor de una ciudad que tiene como legado una historia impregnada de sangre indígena hoy visible en las casonas que pertenecieron a los varones de caucho –los pueblos indígenas Bora, Ocaina y Murui del río Putumayo que han sido vejados y asesinados con crueldad no han tenido una CVR para definir responsabilidades vinculantes que de paso a la “construcción de políticas de memoria, justicia y reparación en el Perú”–, y de hados y hábitos ominosos que hicieron de la clase dirigente una barbarie de la planificación y conducción del destino del pueblo loretano. Los indicadores de la ausencia de liderazgo son la imposibilidad de resolver el ínfimo problema de la basura, la inseguridad ciudadana, escasa cobertura y calidad de la atención médica en bien de las personas con bajos recursos económicos, disminución de la canasta familiar diaria, falta de un censo y monitoreo efectivo de la situación socio-económica de cada persona a fin de responder oportunamente cada contingencia y, por último, la abstracción en que vive los “bosquesinos” –si la pródiga selva hubiera sufrido alguna grave e irreversible fatalidad, los “bosquesinos” hubieran demandado inmensos paquetes de asistencia al Estado, por entonces, el bosque es el mayor dispensador de bienestar–. Iquitos así lo demuestra ante la mirada de sus pobladores y ante el mundo.
En agosto el presidente Humala anunció el hallazgo de petróleo en el lote 95 (Perenco), quien dijo “fortalecerá el concepto de seguridad energética del Perú”. Ante el inicio de otro periodo de bonanza sin haber cerrado las heridas abiertas que se perpetró en 40 años de irresponsable actividad petrolera en la selva, es muy indispensable revisar nuestra postura como ciudadano, implementar acciones concretas para evitar otro desastre social y ambiental, definir mecanismos que permita una mejor distribución de la riqueza petrolera en los pueblos y comunidades que viven en la zona de influencia (pozo Bretaña). La riqueza de la tierra está destinada a florecer los sueños y felicidad de sus habitantes, que implica la protección de la estructura geológica y de sus vitales componentes.
    

La circunstancia no está para actuar con displicencia ante los riesgos, es tiempo de pensar en el futuro a partir de los antecedentes y emprender una empresa que dé testimonio de la existencia de personas que hicieron de su estancia social un gran deber.

Monday, July 29, 2013

“El amanecer de la palabra”

Con la finalidad de lograr el afianzamiento de la cultura étnica en el marco de la iniciativa que la Asociación Curuinsi viene desarrollando con el apoyo del Gobierno Regional, Red Ambiental Loretana,  Instituto de Investigación de la Amazonía Peruana (IIAP) y Radio La Voz de la Selva, en los últimos dos años, se ha conseguido revitalizar y practicar conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas murui, ocaina y bora del Perú –cuyo legado ha sido gravemente trastocado por el régimen inhumano perpetrado en la época del caucho en el Putumayo–; a partir de la  participación de sabedores ancestrales provenientes de las cuencas del Putumayo, Ampiyacu y Napo –la mayoría de los sabedores ancestrales son ancianos y que en el decurso de la “modernidad” han sido impelidos a la soledad y a la diáspora exorbitante de sus tradiciones y seguidores, habiéndose resistido muchos de ellos con la fuerza inmortal del espíritu infundido por los antepasados  y han permanecido vigentes a través de sus cantos, cosechas, rituales y concejos; y unos pocos no han remontado la nimiedad de la intemperancia del alcohol introducido, inicialmente, por los misioneros para doblegar la pertinacia de su propia fe e inocular el fervor religioso de las “reducciones”–, con la expectativa de ampliar la presencia de sabedores de otros pueblos originarios.

En la “Maloka del Aprendizaje y Encuentro Intercultural”, construido el año 2011 aplicando la arquitectura tradicional del pueblo murui, se han establecido metodologías y procedimientos de estudio y reflexión de los saberes ancestrales dirigidos a concretar su revitalización y escrutar con el imaginario el vasto conocimiento étnico que fue apilado por investigadores y recopiladores en los museos y bibliotecas en distintas partes del mundo. Riquísimos conocimientos hoy adormilados habrían de recalar en la necesidad intercultural de estos tiempos y conectarse con el efluvio de la palabra que cada noche los sabedores reproducen en la maloka de la Asociación Curuinsi; y la persistencia de los jóvenes interesados en su aprendizaje encuentren en su esencia el contenido puro ausente aun en sus propósitos.  

Los sabedores son la expresión milenaria de la vocación de enseñar y guiar por el camino de la sabiduría que atañe la comprensión material e inmaterial de la naturaleza –se constituyen en el interior de un pequeño universo que se comunica con honestidad y responsabilidad con otros universos (agua, aire, bosque, tierra, fuego, especies) y procuran el reino de la armonía y fecundidad al servicio del todo–, mediante el ejercicio de las principales virtudes que se sostiene en la buena conducta y en el cumplimiento de un catálogo de dietas  (abstinencia moderado de los hábitos que tienden a una nociva deformación). Los sabedores y sus discípulos –jóvenes de la etnia murui, bora, kichwa, ocaina, awajún y shawi forman parte ya del círculo del mambeadero y gravitan en relación a la admiración de los saberes que allí van amaneciendo–, encuentran en el cumplimiento de los deberes connaturales una forma de catarsis reivindicativa y afianzamiento con el nivel más profundo de la vida comunitaria, observando e interpretando cada gesto y haciendo duradera, en su conciencia, el huerto del bienestar. Cada ángulo del interior de la Maloka está siendo ocupado por una pequeña comunidad de enseñanza y aprendizaje, y el hálito de la coca y el tabaco envuelven y protegen en espiral en calidad de un verdadero maestro.

El 9 de agosto del 2013, la Asociación Curuinsi, en cumplimiento con el legado de nuestros antepasados tiene previsto hacer amanecer la palabra, que implica la presentación de los resultados obtenidos durante el periodo de revitalización cultural; en efecto, también se ha de reciprocar mediante la fiesta tradicional “okïe” –fiesta que se realiza con el fin de compartir los frutos del esfuerzo, agradecer a la madre tierra y mejorar las relaciones sociales con el derredor material e inmaterial–. Según la tradición oral de los pueblos murui, ocaina y bora “la palabra tiene que amanecer”; es decir, la reproducción oral de los saberes ancestrales se debe manifestar en la expresión fértil de la tierra, en la cosecha de los cultivos, la virtud de sus habitantes y la armoniosa relación con el bosque. Se presentará, además, lo que se ha hendido y creado en el corazón de dos piezas de madera dura para dar vida a las percusiones del manguaré.


Friday, June 07, 2013

Beca 18: desaciertos y desafíos.



El Programa Beca 18 tiene un enfoque general de la pobreza en el país. Los pueblos indígenas son incluidos en el Programa sin el reconocimiento de los derechos que establece el Convenio 169 de la OIT. La enseñanza que recibe la comunidad escolar en los pueblos indígenas es equivalente a los problemas que causan el ausentismo de maestros en las escuelas bosquesinas, el incumplimiento práctico del plan de estudios y la escasez de la calidad pedagógica por falta de materiales y dedicación de los maestros. Las consecuencias de una incompleta e insustancial educación bosquesina no son comparables con el nivel de enseñanza que recibe la comunidad escolar de los centros poblados urbanos - marginales. 

El problema mayor que atañe a la educación de los pueblos indígenas es la carencia de idoneidad del enfoque socio – cultural aplicado, mediante un sedentario currículo, al todavía ignoto mundo de los saberes y valores ancestrales. El sistema educativo vigente en las escuelas bosquesinas es un pivote del régimen capitalista y deteriora, con vehemente seducción e imperativo método científico, la base de los conocimientos tradicionales que constituye la única fuente de sostenimiento duradero y autónomo de los pueblos indígenas. 

En los requisitos de postulación se considera, explícitamente, como beneficiarios del Programa Beca 18 a los Jóvenes de comunidades andinas, amazónicas, afroperuanas y de frontera; empero, su aplicación es homogénea, y la validación de la situación socioeconómica de los postulantes denota indiferencia e inaceptable ignorancia respecto de las antiguas y recientes estadísticas que prueba la situación de pobreza de los pueblos indígenas. Los promedios escolar exigidos, 14  para la universidad y 13 para institutos, excluye en seco el deseo de superación de jóvenes que habitan comunidades bosquesinas y –varios jóvenes que han concluido secundaria en colegios que junto a los tributarios escriben su propia odisea y construyen el interminable puente de ansiado intercambio cultural con la tierra urbana y urbano marginal, aun no han perdido la esperanza de encontrar un punto de apoyo para el florecimiento de extraordinarias y autóctonas capacidades–,  constituye una reivindicativa oportunidad para los “jóvenes con alto rendimiento académico en situación de pobreza y/o pobreza extrema” que viven en capitales de los distritos de la región Loreto y cinturones de las principales ciudades.

El techo de la edad de los postulantes discrimina endémicas realidades: Jóvenes mayores de 22 años, a excepción de la modalidad especial, que desde temprana edad arrostraron con empeñosa laboriosidad las dificultades generados por la inestabilidad o desintegración familiar, problemas económicos u otras cuestiones relacionadas con los impactos de la indiferencia social, así tuvieron que trabajar y estudiar hasta concluir la secundaria. Son estos compatriotas representantes de una generación estoica y disciplinada que no han dejado de soñar en un estatus profesional para crear y liderar nuevos procesos que han logrado conocer desde adentro, y florece aquella legendaria búsqueda con la brisa de la esperanza proveniente del halo que la pródiga economía nacional oferta.    
Estos antecedentes evidencia la preeminencia del enfoque urbano y mercantilista sobre la realidad multicultural del país. Las decisiones gubernamentales padecen del atavismo de las reducciones, no creíble ni aceptable ante la luz del progresivo juicio común. Entonces, corresponde propender hacia la escritura de otro capítulo que armonice las oportunidades y política de Estado con las condiciones socioeconómicas y antropológicas de los pueblos bosquesinos. No se busca exenciones frívolas ni lastimeros miramientos sino clarificar el camino virginal que el Estado no puede ver con su lente anquilosada, y aliviar el hacinamiento que la anomia encausa en agravio del espíritu colectivo y de la frondosa expectativa de las personas que tiene las facultades y condiciones humadas de postular al Programa Beca 18.

Actualmente, el reclamo conjunto de los jóvenes Murui, Maijuna, Awajún, Kichwa, Shawi, Bora y otros están encaminados hacia el MIDIS; ellos, tuvieron que venir desde sus comunidades a la ciudad de Iquitos para postular a Beca 18. No han logrado pasar el parapeto de los requisitos, y esperan otra oportunidad.


Tuesday, May 28, 2013

EIB - Loreto: árbol desmembrado.



En la apertura del “círculo pedagógico” para asuntos relacionados con la Educación Intercultural Bilingüe (EIB) en Loreto, de autoría del reconocido investigador y educador José Barletti, me enteré de la inminente ejecución de un proyecto “no escolarizado” que tiene como universo la niñez de los pueblos indígenas. El proyecto, según la explicación contextual del facilitador de la Dirección Regional de Educación de Loreto, tiene como finalidad el afianzamiento temprano de la cultura propia en la vida social – familiar de los niños que no tienen la oportunidad de recibir las cualidades de la educación inicial; mediante una tutoría vernácula de personas (preferentemente jóvenes que han culminado estudios secundarios) previamente capacitados para desarrollar aptitudes concomitantes con los objetivos planteados, cuya idoneidad ha de concretarse en una forma de convivencia donde se inculque valores ancestrales. El enfoque ha sido aprobado sin mayor reflexión de los tertulianos –contiene importante aproximación con la aspiración pedagógica que deviene de un proceso revisionista de la EIB, basado en la reproducción de los valores tradicionales y del aprendizaje del conocimiento científico, simultáneamente–, y habían expresado el interés de leer el contenido del inédito y oportuno proyecto a fin de conocer su ámbito de influencia, estrategia y metas.

El momento preliminar del primer capítulo del “círculo pedagógico”, que se llevó acabo en la “Maloka del Aprendizaje y Encuentro Intercultural de la Asociación Curuinsi” en el último sábado, admitió la ausencia de los nuevos y legendarios intelectuales del parsimonioso mundo de la EIB en la amazonía peruana; cuyas obras y experiencias constituyen un riquísimo prontuario sobre la interculturalidad étnica y una profusa ventaja de capacidades afines que, hace mucho tiempo, su aplicación rigurosa y generosa hubiera puesto fin a la disarmónica distancia existente entre una propuesta y otra, que persiguen el mismo objetivo: diseñar un sistema principal de EIB - región Loreto, según la percepción y prácticas de cada pueblo indígena. Empero, no ha sido como quisiéramos que florezca, la soñada eclosión de un sistema EIB consensuado en sus aspectos más determinantes quedó sosegada por el ritmo de la carrera individual que emprendió el Instituto Lingüístico de Verano (ILV), EIB del Ministerio de Educación, EIB del Programa de Formación de Maestros Bilingües (FORMABIAP) y por otro lado, las propuestas educativas EIB diseñadas por Heinrich Helberg, José Barletti, Jorge Gasché, Gabel Sotil y otros ilustres pensadores; no llegaron jamás a confluir.

Después de medio siglo del nacimiento de la primera propuesta de EIB en la amazonía, ILV, y un cuarto de siglo desde que la experiencia con mayor éxito, FORMABIAP, impulsó una propuesta basado en formar maestros – líderes para mejorar la calidad educativa y defender los derechos de los pueblos indígenas, los resultados de la EIB – Loreto aprobó con nota mínima los escrutinios oficiales y de observación comunitaria.

El actual gobierno nacional aumentó su oferta de apoyo a la EIB. La Dirección Regional de Educación de Loreto conoce la disponibilidad presupuestaria y política del Estado. Esta situación bondadosa debe dar paso a la inmediata implementación de una propuesta EIB regional, mediante la confluencia de experiencias y conocimientos que fulgura la trayectoria de los principales líderes, sabedores, investigadores e intelectuales. Cada uno debe traer consigo el pedazo del “árbol – escuela” que logró construir en su propio taller: uno ha de traer un grupo de raíces, otros traerán partes del tronco, hojas, sabia y espíritu. No es una coyuntura para responder con proyectos pensados muy deprisa, es una oportunidad para ganar la guerra a la inmediatez, a los intereses propios y a la inextinguible sombra de la desunión.

El “círculo pedagógico” es una gran iniciativa que nació, estoy seguro, con el fin de dar respuesta al anacronismo y a la investigación para el museo.


Thursday, May 16, 2013

Abstracción de la persona.



No se ha privilegiado a la persona humana en la época colonial, tampoco en la vida republicana del país. En la colonia gobernó el régimen de la esclavitud y de la muerte, condiciones infrahumanas de trabajo y la negación de las libertades han sellado el perdurable e ignominioso atavismo, que se ubica en el corazón de la sociedad actual que, junto al río y los bosques, vislumbra su lenta decadencia y declinación de ineludibles valores que hubiesen de reproducir culturas que procuran la felicidad como base del progreso. La república, hundido en el seno del inevitable sistema extractivista y sus efectos laterales, aumentó la hendidura de la desigualdad y del individualismo suntuario; por ejemplo, el actual crecimiento “sostenido” de la economía viene engrosando las cuentas del poderoso y codicioso empresariado nacional y supranacional, en desmedro de los derechos de bienestar de los connacionales empobrecidos, cuyas tierras pródigas se han convertido en furtivos arrendamientos, elitista rebatiña y desprovista floresta. En consecuencia, los pueblos y comunidades aislados del foco de oportunidades –Lima, “la ciudad de los reyes”, es un símbolo del anacrónico centralismo vigente y copiosa prosopopeya de leyendas virreinales, un monstruo de diez millones de cabezas que reverbera con el esplendor emergente de la metrópoli, en comparsa con el fervor consumista– han repensado ir por dos caminos: uno, gestar una autonomía socio-cultural sobre la herencia primigenia que fortalezca la vital dualidad hombre – naturaleza, levantar una muralla que aísle las variables contaminantes y ayude el aprendizaje selectivo de la ciencia y tecnología; dos, dejar que la diáspora “bosquesina” se introduzca en el alma de la sociedad urbana y desde adentro, en reductos organizados y colectivos dinámicos, habían de exigir y cumplir derechos y deberes. Ambos senderos plantean no prescindir sino elevar el rol de la persona humana en reciprocidad, libertad y saludable espiritualidad.
No estoy enterado de alguna experiencia peruana que tenga relación con la búsqueda decisiva y concreta de la autonomía para una vida mejor de los pueblos originarios que han proclamado derechos territoriales adquiridos con anterioridad a la fundación del Estado, y que la felicidad de la persona humana constituya el fin supremo; aunque tenga la connotación de una atractiva y obligatoria utopía social, sí he conocido importantes experiencias dignas de ilustrar los resultados alcanzados, por ejemplo, el Programa de Formación de Maestros Bilingües de la Amazonia Peruana (FORMABIAP) logró importantes metas y objetivos sin haber creado o previsto –el diseño de un proyecto de desarrollo propio de los pueblos indígenas no ha sido el objetivo principal de FORMABIAP– un sistema educativo autónomo y propio, en consecuencia, los maestros indígenas de varios pueblos también han educado personas que han de servir al sistema de economía de mercado –los pocos profesionales indígenas (sociólogos, abogados, administradores, ingenieros, contadores, enfermeros), en la actualidad, trabajan para el Estado y empresas privadas–. Pues, la abstracción de capacidades idóneas para un sistema idóneo de bienestar repercute en contra de toda iniciativa que tenga como objetivo crear una vida comunitaria auto-sostenible y responsable de su propia forma de confrontar la pobreza, adquirida.  
  
La inversión púbica pregona la construcción de infraestructuras de gran envergadura (colegios emblemáticos, carreteras, hospitales, museos, embarcaderos, estadios deportivos, alcantarillados…) que, obviamente, ayudará a mejorar la prestación de los servicios básicos y a la vez beneficiará a los agentes del gobierno a través de un régimen de millonarias prebendas. En este infame contexto, la gobernabilidad y los derechos fundamentales, la promoción del arte y la práctica de valores (no robar, no mentir, actuar con justicia, comunicarse con transparencia, ayudar al prójimo…), la cultura y la educación integral, la etnicidad y el medio ambiente no son prioritarios; es decir, la persona humana no es el fin supremo de la sociedad peruana.

El Reino de Bután, monarquía situada en el sur de Asia central, al este del Himalaya, en el año 1972 decretó que la Felicidad Nacional Bruta (FNB) es más importante que el Producto Nacional Bruto (PNB). La Constitución de Bután, Art. 9, dice “El Estado promueve aquellas condiciones que permitirán la búsqueda de la Felicidad Nacional Bruta”, “Felicidad Nacional Bruta (FNB) mide la calidad de un país en una manera más holística que el PNB y considera que el desarrollo beneficioso de la sociedad humana tiene lugar cuando el desarrollo material y espiritual se produce lado a lado para complementar y reforzarse mutuamente”. (Karma Ura, Sabina Alkire and TshokiZangmo – Felicidad Nacional Bruta e Índice de FNB).

Muchas familias de la selva peruana, en virtud de su riquísima herencia tradicional, realizan actividades propias (elaboración de artesanía, construcción de pequeñas embarcaciones, actividades agrícolas, recolección de frutas, preparación de medicina); millones de personas sobreviven al margen de la asistencia del Estado, con las bondades de un sistema de ocupación informal articulado a la economía de mercado satisfacen medianamente sus necesidades básicas, ¿Qué nivel de vida tuvieran aquellas personas que no han tenido  oportunidades provenientes del Estado u otro tipo de apoyo y se han dedicado incansablemente a la pequeña actividad comercial (comida, costura, zapatería, venta de productos fabricados, servicios de transporte, relojería, etc.). Pues, el crecimiento económico del país se sustenta en el esfuerzo individual de aquellas personas que necesitan mejorar su oficio (capacitación y financiamiento) y puedan darle tiempo a los asuntos de interés público (fortalecer la gobernanza).