Saturday, February 08, 2014

COICA, por el camino seguro.


El Lima – Perú se llevará acabo del 24 al 27 de febrero del 2014 la I Reunión del Consejo Directivo y la I Reunión del Consejo de Coordinación de la COICA, correspondiente al presente año. El renovado Consejo Directivo de COICA (CDC) con la dirección del ratificado presidente Edwin Vásquez construirán juntos  o reforzarán  los objetivos fundacionales de COICA en clara respuesta a los cambios locales, regionales y globales que involucra en forma irrenunciable la vida y cultura de los pueblos indígenas de América del Sur. El plan que se ha de implementar para sobrellevar progresivamente el manto tenebroso de la industria adverso al derecho del “buen vivir” contiene actividades concretas que no hará abstracción jamás de la necesidad y derecho de posesión autónoma del territorio ocupado generacionalmente y durante miles años previos a la formación de los estados nacionales.

La valoración del territorio para los pueblos indígenas es análoga a la importancia que tiene el corazón y el alma en la vigencia de la vida del ser humano, pues, el corazón sostiene la vida orgánica y el alma soporta y nutre los valores espirituales. El territorio es la única fuente de vida interna conocida en este planeta como lo es el sol desde el espacio sideral, entonces, es indiscutible, innegociable y vital el control y reproducción cultural que los pueblos indígenas hubieren de ejercer con mayor libertad y valentía sobre un legado fértil e insustituible. Esta plataforma de consideraciones prácticas y de razonamientos holísticos se conciben hoy en la institucionalidad de COICA mediante los siguiente instrumento de gestión: La Agenda Indígena Amazónica AIA –AIA ha sido tejido desde el año 2002 con la finalidad de impulsar el  retorno a la maloca (practicando los saberes ancestrales) y desde allí articular “nuestras políticas integrales con los planes y proyectos de los estados y empresas buscando siempre coherencia con nuestra realidad y acorde a nuestras necesidades”, así como generar información sobre nuestra historia de lucha y construir antecedentes sociales que han de servir de ejemplo en nuestros diarios quehaceres–, más tarde la AIA se ha ido fusionando, sin abandonar su núcleo, con el “Plan de Vida de los Pueblos Indígenas Amazónicos”. Cuyos ejes temáticos han transitado de acuerdo a los nuevos desafíos sin abandonar su espíritu y sueños primigenios.

En el seno del “Plan de Vida de los Pueblos indígenas Amazónicos” de América del Sur, los órganos de gobierno de COICA, reforzarán y validarán el Plan Estratégico Institucional 2013 – 1017, el Plan Operativo Anual 2014, Reglamento Interno de Administración y el Plan Estratégico COP20 de la ONU sobre cambio climático (Lima, diciembre 2014). La visión hacia el horizonte de una comunidad o de un pueblo es posible solamente con la participación de sus habitantes en la construcción de sus planes y actividades –nuestros antepasados hacían planes realizables con la participación de sus hombres y mujeres que han sido formados para comprender el mundo con mayor claridad e integralidad, con la ayuda de las plantas maestras como la coca, el tabaco, el toé y la ayahuasca encontraban la armonía de lo posible y del éxito en el fuero dominado por dos realidades: el mundo visible y el espiritual– y asegurar la distribución fluida de los acuerdos, experiencias, estudios y oportunidades haciendo que ninguno cohabite con la ignorancia y la ausencia de buenos criterios.


La agenda de la reunión del Consejo Directivo y del Consejo de Coordinación de COICA recoge los temas más importantes, cuya implementación conjunta y eficiente ayudará a mejorar la expectativa de bienestar tan alto como el deseo de mejorar cada día en la vida comunitaria.

Thursday, February 06, 2014

Hacia dónde vamos, en política.

Los pueblos indígenas del Perú habían estado muy cerca de iniciar un proceso político partidario basado en la unidad y la progresista pervivencia desde el año 1997, año de fundación de la Coordinadora Permanente de los Pueblos Indígenas del Perú (COPPIP) –creada por acuerdo del Primer Congreso Nacional de Derechos Humanos y Pueblos Indígenas del Perú realizado en Cusco–, su misión de “Promover la unidad, el fortalecimiento y desarrollo de los pueblos indígenas con identidad y autonomía, practicar el respeto y la interculturalidad y sensibilizar a los pueblos, poblaciones y sociedad nacional en el carácter multiétnico, plurinacional y multilingüe del Estado peruano” ha constituido la plataforma doctrinaria y espiritual, de los líderes de entonces, que les llevó a explorar el mundo de la política partidaria y las posibilidades de encaminar el viejo sueño del bienestar común.

Cuando estuvieron llevando la agenda política sobre los hombros de los compromisos –construidos en el seno de una profusa capacidad organizativa– de las expectativas y esperanzas no pudieron pasar el parapeto de la clase política elitista, centralista y mercantilista del país. La ausencia de un partido político propio había impedido el propósito de encumbrar la plataforma doctrinaria de los pueblos indígenas y rezumó los intereses políticos nacionales en agravio de un proyecto que buscó liderar con claridad y constancia. Al final de una tortuosa y desigual vinculación líderes y profesionales cercanos al proceso indígena lograron empleo en la estructura del gobierno a quién habían apuntalado en las urnas. Esta experiencia no ha sido revisado metódicamente, en efecto, la historia no puede abrir  página alguna dotado de información rigurosa que los nuevos actores necesitan a fin de remontar los desafíos que después de muchos años se han convertido en verdaderos objetivos en lontananza.

En el terreno mullido quedó una especie de semilla (de la política partidaria amazónica) que germina solamente cuando se impregna con el agua de algún manantial, de la tierra donde se vive en plenitud la cultura primigenia y donde la mirada global no reverbera el dogmatismo ni el desinterés sino es entendida como una realidad distinta que permite esbozar las cualidades de una sociedad autónoma que va inconteniblemente hacia la complementariedad duradera de su esencia. Entonces, los desatinos de la política pública del segundo gobierno del aprismo peruano, impelido por el extractivismo inhumano, perpetró uno de los mayores crímenes de lesa humanidad y genocidio en Bagua (territorio del  pueblo Awajún), conocido como el “Baguazo” (5 junio 2009). A partir de aquella trágica experiencia brotó la semilla subterránea regada por la sangre prístina de un funesto tendal y, nuevamente, se habló y trabajó en la idea de avanzar en la consolidación de una ventana política denominado “Alianza para la Alternativa de la Humanidad” (APHU).   En el año 2011 una tentativa de alianza entre el Partido Nacionalista Gana Perú (hoy en el poder) se quebró por las siguientes razones: El ninguneo que Gana Perú dejó entrever en sus dictados al momento de ofertar sitiales de representación parlamentaria, pues, nunca hubiera habido equivalencia en una relación desigual en el fuero institucional, APHU era muy joven y no estaba inscrito. Otro motivo fue la falta de voces consensuadas y se escuchó más el barullo de una pequeña mesnada de distintos credos.


Actualmente, el terreno de la política partidaria con enfoque amazónico se ha difuminado en relación directa con la exigua preocupación común, el desinterés por lo propio y la prevalencia gregaria de los pueblos indígenas que en pos de la rancia politiquería nacional ayudan a retrasar la germinación de la semilla de ensueño cuyo pericarpio se abrirá cuando los pueblos decidan caminar en el marco de una institución política sólida –cuyas ideas y planes hubieren de gozar del privilegio y seguridad de su realización por verdaderos líderes nunca antes visto en la historia republicana del país– con autonomía, sabiduría, transitando desde la inmediatez coyuntural a la perseverancia estoica, e inquebrantablemente unidos.   

Sunday, February 02, 2014

Gaigirgordub: halo del Caribe.

Cerca del canal de Panamá se encuentra el territorio Kuna –pueblo originario que mantiene vivo su legendario conocimiento del mar Caribe colindante con su  bosque tropical que constituyen la principal e insustituible fuente de bienestar común–  que evidencia con nitidez la capacidad de mantener su esplendor y riqueza sobreponiéndose a la vehemencia del extractivismo regional y global. Los kunas han heredado una hermosa y profusa tradición cultural que fue defendido con honor y valentía por sus  líderes ante la siniestra política del Estado panameño que estuvo destinado a homogeneizar los derechos ciudadanos prescindiendo de los valores congénitos de sociedades milenarias ubicadas en su jurisdicción. Actualmente, la cultura Kuna florece de acuerdo a su propia forma de ver el mundo y el viento del mar Caribe no ha dejado de correr deprisa llevando consigo incansablemente por el mundo entero historias, sensaciones y mensajes de proezas legendarias y cotidianas, aromas, sensación del arte singularmente minimalista –en la pequeña isla Gaigirgordub, a un kilómetro de distancia, late con vitalidad el “Museo Kuna” que comprende una bella y respetable memoria donde la nueva generación renueva su identidad y compromiso con la prosperidad cultural– y de la luz de aquellos símbolos propios se ha construido la bandera oficial del pueblo kuna, que ondea con orgullo su comarca en señal de libertad,  autonomía y esperanza.  

En la isla Gaigirgordub parte de la Comarca Kuna –mientras el vaivén de las olas susurraban con recato sobre la misteriosa y provechosa relación espiritual que conserva el pueblo primigenio con el mar– el abuelo Naibe, Secretario del Consejo Kuna, septuagenario, cabello largo y canoso, trigueño, un poco obstinado, cauto en proferir sobre su tradición y muy enterado de los desafíos y amenazas que merodean su comarca, con voz aguda y buen español me habló sustancialmente sobre la historia de su casta: “Nuestros abuelos nos enseñaron muchas cosas que nos ayudan a vivir en paz con el bosque y el mar, la autonomía que tenemos en la comarca es el resultado de heroísmo y fortaleza común contrapuesto a los intereses económicos del Estado panameño, en 10 días vamos a conmemorar el éxito de una revolución que nos libró de la eterna esclavitud.  No permitimos la implementación de proyectos que amenazan con grandes impactos debido a su capacidad demostrada de convertirse en varios demonios, entonces, decidimos desarrollar actividades orientados al sector turismo basados en los servicios de hospedaje, alimentación y venta de artesanías. Actualmente llevamos adelante la implementación de la escuela intercultural Kuna, con el 30% de apoyo del gobierno de Panamá y el 70% del gobierno de España”; cuando pregunté sobre la pesca en el mar y sus conocimientos conexos me dijo que “de eso te hablaré después”. Con una sonrisa que iluminó su cansina y propia complexión se despidió de mí.

Durante mi breve estadía en Gaigirgordub vi la pesca de bonito con caña y disfruté varias veces de un plato que bellas mujeres kuna con trajes bordados y adornos en los brazos habían preparado. Turistas que arribaron en veleros procedentes de Norteamérica y Europa exultaron de las bondades que ofertan la culinaria y la hospitalidad de la isla. Los albergues están construidos de madera local, su pared está hecha de miles de varillas como si fuera un seto organizado por un esteta, hojas cuidadosamente tejidos conforman un techo que convive con la brisa y el sol abrasador.


No es para menos, en Gaigirgordub, acaba de concluir con mucho éxito la “Reunión Regional Abya Yala Diálogo entre el Banco Mundial y los Pueblos indígenas, Políticas Operativas – Salvaguardas”, con la participaron de líderes indígenas de América Latina y el Caribe.